Calentito.
Con las manos manchadas,
contenta y entusiasmada
pongo fin a una tarde
dedicada a pintar.
De fondo escucho una música
que envuelve las horas
que pasan rápidas.
No siento cansancio
la adrenalina está a tope,
soy capaz
de olvidarme del tiempo.
Lo que importa
es estar dispuesta
en cuerpo y alma
a disfrutar de esta afición.
Que me lleva, apasiona,
hace que viva este momento
que es solo para mi.
Sumergida
en una tarde
de lluvia tras de los cristales,
pero no triste.
Envuelta
en esa música maravillosa
que deja volar mi fantasía
hasta más allá de las penas
y los dolores.
Feliz
La vida dura tan poco
que
hay que cogerla por los pelos
y
disfrutar de las cosas pequeñas.
Mavi g.g.
1 comentario:
Qué bien pintas y qué bien escribes.
Gracias por compartirlo Mavi.
Besos.
Publicar un comentario