jueves, 26 de julio de 2012

GRITO



!Que me quieras en vivo,
como te quiero en directo!

*Complejos pueriles.
*No hay puerta que no pueda ser abierta,
ni ventana que no mire al horizonte
y desde ella se vea
el mar.*

Sal de tu escondido corazón.*

El tiempo pasa tan deprisa,
poco a poco,
 casi sin darnos cuenta.

Y un grito fuera de sí
sera la señal de que te espero.

Y más allá... El mar.




miércoles, 25 de julio de 2012

CANSANCIO


Noche oscura de luna llena,
cansancio en los ojos,
desgastada la palabra.

Busco sentido a lo sinsentido
voluntad indecisa y frágil,
boca amarga ,largo el deseo,
llagas en el sentimiento
donde vive mi nostalgia,
una cueva oscura y fresca
que me refugia de ti.

Grito desgarrado que no escuchas
mi voz no tiene eco
no tiene salida sin ti.









martes, 24 de julio de 2012

DÍA DE LA MERMELADA



 EL MANZANO ESTE AÑO DIO SU FRUTO
Si el manzano de mi huerta,
regaló generoso su fruto.
Era necesario festejarlo.

La familia unida preparó en cadena
el "Día de la mermelada"

Tarde calurosa, frenética
de industria familiar.
cada cual hizo su función,
y como una fiesta,
el rito comenzó.

Más de treinta tarros 
de rica confitura
que habrá que repartir.

Y es que en la vida,
como el manzano,
hay que darse y morir
para mostrar
la generosidad de ese acto 
de compartir los dones recibidos.

Creo yo que;

Ser manzano generoso
y dar en fruto
aquello que nos distingue
es motivo de amor y de alegría interior.

Después uno se olvidad del hecho,
y vuelve a empezar.

Ejemplo que multiplica 
lo más importante
de la persona.
"Compartir para sentirse feliz"

Así me siento hoy,
como el manzano que quedó desnudo
con el alma al aire.



domingo, 22 de julio de 2012

VUELO



Al pie del Faro,
 volaban como cometas
subidos a aquel artilugio frágil.

Giraban y giraban de un modo
alucinante.

Pensé en no mirar.
Creí que si lo hacía
se desplomarían sobre el mar.

Una sensación encontrada
que me daba pavor
 y vértigo a la vez.

Por un momento era yo,
quien manejaba los hilos,
 moviendolos
en un vertiginoso vaivén mareante.
Cayendo en picado
como gaviota ligera.

Sensación encontrada.
 Es la vida misma.

 Vértigo de lo desconocido,
sentirse libre, sin ataduras al suelo,
volar a ras de las nubes.

Más la razón impide la locura
del   momento de despegar
 hacia el cielo,
que  es  lo que el alma ansía.

Ser libre.