YO tengo una muñeca,
No vestida de Azul
con su camisita
y su canesú.
Las muñecas
puede llegar a ser una pasión,
una infancia retenida.
Una ilusión.
Con sus bracitos abiertos
quieren darte
-algunas veces-
auellos abrazos
que te niegan
los humanos.
Por eso YO
amo mis muñecas
No vestidas de azul.
Mavi g.g.