Siento como esta niña,
tu beso cálido en la mejilla, madre.
Añoro un tiempo feliz pasado,
pero vivo un presente
para desdoblarse, derramarse
con quien amas.
Dar calor, confianza
y mucho amor,
a un futuro que nos salva
de una vida vacía y triste.
Reviso al anochecer
una historia, un tiempo de balance.
Una luz flota, resplandece
sobre el cristal de mi ventana,
y la nostalgia de ausencias
se desvanece.
Un aroma fragante a romero
llega por el aire imprecisa,
Una poesía nueva
me deja la esperanza,
de un sueño con sabor a mar.
Mavi g.g.
1 comentario:
Lamentarse por el pasado no sirve de nada, preocuparse por el futuro tampoco porque por mucho que lo planees todo nunca sale nada como esperas, simplemente fluye y vive, sin más.
Un saludo.
Publicar un comentario