A UN GATO
Viniste a mí, pequeño, blanco, desvalido.
Un cielo son tus ojos
aguas mansas que adoro,
cuando en mi regazo,
confiado ronroneas.
Me quitas las penas con una mirada,
curioso, airoso, precioso,
suave, elegante y armonioso,
silencioso, misterioso,
es mi gato
algo perezoso
pero muy hermoso.