Fría tengo la garganta,
se me hiela la voz al nombrarte.
Quisiera hablarte de amor
y quedo aprisionada, muda.
Desaliento de un querer imposible
¿como llegar a ti sin que te vayas?.
No escucha tu oído mi lamento.
Todo lo veo gris,
cenizas que envuelven una ilusión
tan solo compartida por mi.
Me queda la duda,
si merece la pena tanto esfuerzo
por comprenderte.
Una palabra se alza
en lenta agonía,
¿qué hacer?
como un rayo que parte en dos
un cielo incendiado.
.
5 comentarios:
la voz hablante traspasa su congoja al ojo lector
hay amores que nunca se dan por aludidos
es una pena
abrazo y gracias por tu huella
Quizás son los rescoldos que aún existen entre las cenizas.
Un abrazo y feliz semana.
"No escucha tu oído mi lamento.
Todo lo veo gris,
cenizas que envuelven una ilusión
tan solo compartida por mi". Llevo todo conmigo, comovido. Me ha gustado de todo que hé leído. Todo espacio bien cuidado, de mucha sensibilidad. Esoy ya a seguirlo.
Gracias.
Gilson.
Magnífica descripción de un amor no compartido. Lamento hecho poesía.HERMOSO.
Gracias por pasar por aquí, siempre sois bienvenidos.
Un abrazo.
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