Hoy terminé de leer el libro/biográfico de la vida de waris Dirie "La flor del desierto" y no me ha defraudado,mas bien he quedado impactada por la fuerza de la narración de una vida intensa de dolor y predestinación a la vez.
Es descubrir la historia de una persona fuerte en sus decisiones, y sin embargo frágil como ser humano, señalada por el destino.
Alguien que, sin saberlo, estaba destinadas con su actitud a ser embajadora y antorcha de luz radiante para defender a las mujeres sometidas a la MGF, mutilación genital femenina, de su país Somália y en conjunto a la mujer africana en general.
Me reafirmo en mi admiración a su persona y a su causa. Creo que como otros personajes importantes, Waris estaba predestinada, para esa labor y ahí sigue en su lucha.
Mujeres como ella son hito de la historia en defensa de los mas desfavorecidos.
Su historia debería ser conocida como ejemplo de valentía, fortaleza y humildad, porque habiendo llegado a la fama rutilante, siguió siendo, como reconoce, una africana orgullosa de serlo y amando como nadie sus raíces.
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