viernes, 30 de noviembre de 2018

TIEMPO

Tropezar, caer literalmente
al suelo, da
una sensación de desamparo total.
Estaba de Dios.
La vida tiene también
esos momentos que no esperas.
Me levanté a duras penas
como una niña dolorida
no lloré por vergüenza.

Pensé entonces,
¿el temor a la vejez,
envejece?
Sigo de pie, mi rostro arde.

Las manos ya son menos suaves
pero sirven para acariciar.
Los ojos puede que tengan menos brillo,
pero miran todo con la curiosidad joven.
Hay nieve en mi pelo,
pero hay una sonrisa a cada flor,
a cada pájaro, a cada mariposa.

No hay prisa
ahora se escucha
se disfruta todo.
Se valora más la amistad
verdadera.
Quiero ser así por siempre jamás.
a pesar del tiempo
que ya no juega a mi favor.

Mavi g.g.

1 comentario:

El collar de Hampstead dijo...

El tiempo nos juega malas pasadas.
Ls amigos ayudan a sobrellevarlas.

Un besazo!