LO DICE UNA MARIONETA DE TRAPO
Una vez cayó en mis manos la lectura
de una historia que me causó una gran curiosidad.
La de una pequeña marioneta de trapo que pedía a Dios
convertir su corazón de madera en un corazón humano.
Enfrascada en el relato
quise ser eses pequeño muñeco
y soñé por un momento que así fuera..
Me dije que,
- No diría todo lo que pienso,
pero, pensaría muy bien todo lo que digo.
Que dormiría poco, para soñar más.
Caminaría cuando otros se detienen.
Escucharía cuando los demás hablan,
con interés,
y en ese momento daría gracias a Dios.
Nos paramos poco a escuchar al otro,
enfrascados en nuestro primer y único mundo.
Vestiría sencilla, me acurrucaría al sol
dejando desnudo mi cuerpo y mi alma de cosas vanas.
¡Dios mio si yo tuviera un corazón humano¡ -dijo-
No habría odio ni envidia, lo escribiría sobre la escarcha
y que el sol se lo llevase al despertar...
Me pararía a mirar las rosas de la vida
acariciando sus espinas
y disfrutaría de la suavidad de sus pétalos.
sin prisa.
¡Dios mío si yo tuviera un corazón humano¡ -dijo-
No pararía de decir a la gente que quiero
¡que la quiero¡
Pintaría algo hermoso para ellos.
Cantaría una serenata a la Luna en las noches oscuras,
y viviría... enamorada del amor.
A los que se sienten viejos para amar,
-les diría
lo equivocados que están,
que solo el que deja de enamorarse envejece.
Hablaría del olvido, la única manera de morir
No se muere por ser viejo sino por haber olvidado
amar.
Que no basta con llegar a la cima del mundo,
sino que es mejor saber llegar
subiendo de la mano poco a poco,
encontrando paz y felicidad en el empeño
Aprender que solo debemos mirar al ser humano
desde arriba...
para ayudarle a levantarse.
Son muchas más las cosas que intentaría,
pero se me acaba el tiempo.
Y porque al fin dentro de mi bolsa de tela
seré un muñeco de trapo
y me estaré muriendo para siempre.
Mavi g.g