
Es fascinante para mi,en esta vida, a veces racana de alegrías y llena de dificultades, encontrar este remanso de poesía y bien hacer de mi hijo Oscar, con el que comparto tantas cosas.
Admiro su brillantez como persona,como escritor y cuando me sumerjo en la lectura de su poesía, de su prosa, de su novela, verdaderamente me siento una madre feliz y orgullosa.
Pienso que está haciendo essas cosas que han sido mi anhelo desde siempre, solo que él las ha materializado con maestría.Bendito sea por la alegría que para mi supone.
Y para muestra una parte de:
REGRESO
Volver al mar es como no haberse ido nunca
de ser niño, la fácil felicidad, del mordisco del agua,
de la piel abrasada, de los ojos ciegos.
Cuando llego,
ya me están llamando las olas,
lamen más lejos y rompen fuerte
por avisarme, porque no me pierda
ni me equivoque de playa.
Y tengo esa alegría primera
del que vuelve a casa
del que sabe que la vida sin mar es media vida,
a los demás de qué se trata
porque sabe que no le van a entender