Tic tac, tic tac
escucho el reloj del corazón
emocionada contenta,
la vida me da más
de lo que pido.
Es tiempo de abrir puertas
para conectar, rehacer, levantarse
y echar a andar tras la ilusión
pronto realidad.
Acaso un sentimiento
me lleve a temer,
como la mujer que está de parto,
algo de angustia y dolor,
no estar a la altura.
Más en un impulso
volar ante lo incierto
como rocío temprano,
y cambiar la luz
por las sombras de la duda
y volar, volar cada vez más alto
contigo siempre
a mi lado.
Mavi g.g.