domingo, 13 de mayo de 2018

CASTILLOS DE ARENA

Los besos de agua
son caricias mojadas
de una pasión vivida
nunca acabada.
Es sentir frío contra la piel
en el roce diario,
un ronroneo cotidiano
hecho poema.

Pendiente se está
de no equivocar el camino
que lleva su amor
más allá de los tiempos vividos.

Pensar en lo efímero del gozo
que se persigue,
más,
avanzar por la vida
sin levantar frágiles
castillos de arena
que desmorone sus ilusiones.

Surge la pregunta única
¿de qué sirve vivir ese amor
si no se dan el uno al otro
sin reservas?

Pueden llover desgracias,
llegar a tocar fondo,
siempre habrá un puente
que lleve a la sonrisa
a la esperanza, no a la ira.

Juntos conservan ese amor,
como árbol que protege su hojas verdes
pues lejos de él serían
solo hojas secas.

Mavi g.g.

                                       
   



2 comentarios:

lichazul dijo...

un poema dulce y esperanzador Mavi}
un llamado a la ilusión y esperanza
felicidades
besitos


El collar de Hampstead dijo...

Hojas secas y tristes...
En el amor,si es verdadero,hay que darlo todo.

Bona nit!
Muack!