viernes, 5 de septiembre de 2008

El gran día


No he de poder dormir más. Las mariposas del estómago no me dejan, no sé si es felicidad, preocupación, ansiedad... o yo que se qué. Necesito vivir este bonito día desde el princípio. Enterarme y empaparme de todo, ha sido tanta la espectación y el deseo de que todo vaya bien que estóy como en una nube. Lo mejor de todo es que me siento arropada por mi familia, mis amigos, y todo aquel que me quiere bien.(que son muchos, gracias a Dios)

2 comentarios:

pp@dsuar dijo...

Vive el momento. Con los ojos muy abiertos para que no se te olvide nunca. Aspirando el aire muy profundamente, hasta que lo sientas removerse inquieto en tu estómago, luego, déjalo salir muy poquito a poco. Si tus ojos te piden llorar, no los reprimas; dales la oportunidad de hacerlo. Y cuando todo pase... serénate, tómate unas cápsulas de Paz y recreate en lo vivido. Estas cosas no ocurren con frecuencia y es conveniente conservarlas en el recuerdo. Acompañada de esa nostalgia dulce, sé feliz. Merece la pena.

Mavi dijo...

Todo pasó como esperábamos, con nervios y muchas ganas de vivirlo intensamente sin pensar en nada que nos pudiera contrariar. Hoy ya he bajado de la "nube" y tengo los ojos y el corazón llenos de alegría. Hemos sido felices por un día.