El pan crujiente,
luminoso como el Sol,
y el vino
de aquél puchero de barro,
de acabado perfecto,
de noble materia,
serian su alimento.
Ya no eran tan jóvenes,
pero si hermosos
y se amaban,
no podían vivir
el uno sin el otro.
Juntos pasaban la tarde
sin tocarse, pero juntos,
próximos.
Era evidente,
todos lo decían.
Ese amor tiene perfume
de Primavera.
Mavi g.g.
1ª entrega
: )
ResponderEliminarTu poema tiene aroma a primavera.
Disfrútalo!
Un besito.
pan y vino
ResponderEliminarcuanta simbología!!!
no se necesita nada más
bello cuadro MAVI
besitos y buena semana
La primavera tiene esas cosas.
ResponderEliminarUn abrazo.
La pasión dio paso a la ternura.
ResponderEliminarBesos.
Pan y vino con el se anda el camino del amor. Un abrazo
ResponderEliminarEl roce hace el cariño.
ResponderEliminarUn beso.
Muchas gracias, sois todos muy generosos conmigo.
ResponderEliminarAbrazos.
Más que compañía, llega un momento que al igual que el pan y el vino, somos complementos.
ResponderEliminarUn abrazo.