De aquí, de allá,
de cualquier parte del mundo,
un niño se aferra a su juguete,
como un naufrago a su tabla
en el mar revuelto de la vida.
Sentirse
niño siempre.
Asombrarse
del vuelo de una mariposa,
y volar muy lejos con ella.
Preguntar a la mañana
por qué calienta el sol.
Capacidad de vida encerrada
en un sueño real.
Esas son las preguntas que hacen los niños, así de sencillas y profundas.
ResponderEliminarUn abrazo en la noche.
es un poema precioso MAVI
ResponderEliminarojalá nuestro mirar fuese siempre como la de un niño
abrazos y buen fin de semana
Cuanto me alegra vuestra visita.
ResponderEliminarContenta de escucharte Elisa.
Besos grandes.